04 diciembre 2016
Cosas que no funcionan cuando no tienes privilegios
El mundo, este mundo, no funciona cuando no tienes privilegios. Punto.
03 junio 2016
Cansade
Una vida de médiques y hospitales, desde antes de que me tocara nacer seguramente hasta después de que me toque morir. Imposible llevar la cuenta del número de las visitas o de les supuestes especialistas vistes. Todavía menos de las pruebas, los litros y litros de sangre que me han arrancado, las mutilaciones que me han cubierto de cicatrices, las máquinas e instrumentos salvajes con los que han maltratado mi cuerpo. ¿Cuántos ingresos, cuántas torturas, cuánto dolor ajeno al propio producido por mi cuerpo? ¿Cuántos daños producidos por sus errores, por su ignorancia, por su soberbia, por mejorar sus propias carreras a costa de mis células? Como si no fuera suficiente con tener este cuerpo maldito que se niega a funcionar.

Toda una vida bajo sospecha. Cada nuevo síntoma aparentemente es potencialmente una mentira. Cada nuevo resultado el prefacio de una nueva batalla. Cada nuevo diagnóstico el inicio de una nueva guerra.
Toda una vida creyendo que con los diagnósticos llegaría la confianza, el ser tratade con un mínimo de humanidad. Me tragué la mentira del sistema durante décadas, creí que a les que les han encontrado la enfermedad que les afecta, se les trata de otra forma. Me creí que por lo que yo encontraba semejante barbarie era porque no habían encontrado lo que me afectaba a mí.
Pero no, ingenue de mí. La barbarie es parte del sistema. Y un diagnóstico, o los numerosos que ya van, no cambian el sistema ni un gramo. Y el sistema sanitario replica todos los aspectos más vomitivos de la sociedad que lo ha creado. Jerarquía. Opresión. Discriminación. Desempoderamiento. Yo soy la mierda. Ele especialista está por encima de todes les dioses. Aunque no tenga ni la más remota idea de tu enfermedad. Aunque no haya ni siquiera oído el nombre antes de nombrarlo tú. Siempre tendrás que someterte como paso previo.
26 diciembre 2015
La mierda de este blog
La tropa de cristianes militantes, hiperespañoles fachas, machitos fobos y demás imbéciles que por algún motivo sienten una atracción fatal por este blog y otros blogs similares, últimamente no dejan de brincar de alegría en sus sillas delante de sus pantallas al leer que o bien estoy pensando en dejar este blog, o que me refiero a su contenido con palabras despectivas. Hay que tener un cerebro falto de fantasía para leer en lo que escribo mi conversión a su fe y su fascismo, para creer que por fin me he dado cuenta de su verdad, he visto la luz, tal vez incluso me he convertido y he dejado mis ideas extremas, mi sexualidad desviada, mis relatos pornográficos, mi...
Cuando hablo de que en este blog hay mierda y que me da ganas de vomitar, es por la cantidad de cosas que he escrito a lo largo del tiempo que reflejan ideas normativas y no deconstruidas. Por la cantidad de convenciones y opresión que produzco y reproduzco. Por lo escalofriantemente conservador que mi pensamiento ha sido en tantos puntos y con seguridad lo es en tantos otros todavía. Por el asco que me da reconocer en mí a le facha y a le discípule que a todes nos han metido dentro.
Mierda hay a montones en este blog, pero no aplaudáis tanto, fachoses insistentes, que si leyerais lo que hubiera escrito ahora en lugar de aquello que publiqué con lo que os hacéis las pajas a escondidas, creo que ni se os levantaría del miedo.
11 diciembre 2015
Un retorno o un completo abandono

Tengo ganas de escribir. Tengo cosas que decir. Algunas similares y otras muy diferentes a las que abundan aquí. ¿Pero tal vez ya no debería ser en esta plataforma o bajo este nombre?
05 julio 2015
Impotencia

Casi que me parece que esa es la palabra que define la historia de mi vida más y más. Impotencia ante las circunstancias. Impotencia ante la sociedad. Impotencia ante todas las relaciones humanas y no humanas posibles. Impotencia ante las autoridades. Impotencia ante las casualidades. Impotencia ante les potentes. Impotencia ante un futuro aterrador, impotencia ante un pasado que no es, impotencia ante un presente que no puedo cambiar. Impotencia en la pobreza. Impotencia en mi cuerpo impotente.
Impotencia y nada más. Impotencia en todo lo demás.
21 diciembre 2014
Otro intercambio no gratuito
Esto de escribir un blog es un intercambio que, como todo lo demás en la vida, no es gratuito. Les que están al otro lado quieren alabanzas, sentirse apreciades, saber que reciben algo más que el texto que escribes. No es suficiente con que escribas, tienes que hacerlo con la intención de agradar a le que te va a leer después.

Palabras hay muchas en la red. Aquí ya no hay más halagos.
13 agosto 2014
Se me olvida que existes, blog

12 julio 2014
Otra saeta
Otra saeta clavada en el costado atravesando mi pulmón, dejándome sin aire. Pero claro, en realidad, ¿qué se podía esperar? El error es mío por dejarme engañar por mis propios sentimientos y deseos y tapar mis miedos y las huellas que veo del pasado con falsas esperanzas construidas solo de aire y tus palabras huecas. El error es mío por querer creer que cuando insistes tanto se debe a un sentimiento que amargamente reconozco que jamás has tenido y que nunca vas a tener por mí. Pero duele. Ahora ya te he mostrado mi interés. Otra vez, con ello me aparcas en la cuneta. Ya no despierta tu interés ni tus ganas de seguir buscándome, ya me he vuelto fácil. Si no hubiera contestado, seguirías comentando cada paso que doy, cada cosa que digo en público, cada posibilidad de hacerte notar. Aunque eso temía, contesté. Y ello ha resultado, cómo no, en la manera más eficaz de hacerte parar. Tú no me quieres a mí. Nunca me has querido. Solo necesitas sentirte amada porque estás sola. Y eso duele.
10 mayo 2014
Otro despertar
La inquietante sorpresa de despertarme sudando y con la respiración agitada, el corazón galopando y lágrimas en los ojos al revivir en un sueño aquel acoso en grupo que terminó tan mal y al que se puso fin hace casi dos años. No pensar nunca en ello y al mismo tiempo tenerlo enterrado tan solo a unos milímetros de mi consciencia. No querer darle importancia y sin embargo dejar que afecte a tantos pequeños detalles de mí día a día. Cada breve mención o referencia que se cruza en mi camino acarrea el mismo resultado: en el momento no me afecta, después creo que ni lo pienso y aún así un par de noches después el pavor se apodera de mi fase REM y me arranca por medio de gritos del mundo de las pesadillas a un mar de lágrimas, sudor, saliva, temblores y falta de oxígeno.
27 febrero 2014
Psicoanalízame, por favor

Parece una constante que si escribes sobre algo que no es la norma o desde una posición minoritaria/minorizada, esto será analizado por la mayoría de aquelles que lo leen como que tienes algún problema psicológico, y por tanto siempre habrá alguien liste para, en lugar de comentar sobre lo que has escrito, saltar en tu auxilio con un análisis completo de lo que cree que es tu personalidad, acompañado de una soga. Claro que la soga no es para sacarte de esa agua en la que creen que te estás hundiendo, sino para apretarte el cuello y tirar de ti con todas sus fuerzas e intentar volver a meterte en su norma.
Gracias, misioneres internautas, sin vosotres habría perdido completamente el rumbo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
cargando lista de entradas relacionadas...